La catedral de Arequipa es
considerada como uno de los primeros monumentos religiosos del siglo XVII en la
ciudad. Se construyó en ignimbrita (piedra de origen volcánico), con bóvedas de
ladrillo; es el santuario principal de la ciudad que ocupa todo el lado norte
de la Plaza de Armas. Construida totalmente en sillar, exhibe un estilo
neorrenacentista con cierta influencia gótica. Su fachada está constituida por
setenta columnas con capiteles corintios, tres portadas y dos grandes arcos
laterales. Está rematada por dos altas torres renacentistas y estilizadas. En
su interior se encuentra el altar mayor, hecho con mármol de Carrara y confeccionado
por Felipe Maratillo.
En la nave central se destaca el
incomparable púlpito tallado en madera de encina por el artista Buisine Rigot,
en Lille, Francia, y se ve a Cristo derrotando a la serpiente maligna. Al
fondo, hay un órgano de origen belga, cuyo valor radica en ser uno de los más
grandes de América del Sur. La capilla del Señor del Gran Poder es muy
frecuentada por los lugareños. En 1844 fue destruida por un incendio y reconstruida
en 1868 por el arquitecto arequipeño Lucas Poblete. Es de estilo neoclásico y
los ingresos al templo se ubican en las naves laterales. Fue duramente golpeada
por el terremoto del año 2001, el que afectó seriamente sus torres.
Se construyó el año 1621 dio a la
parroquia el Ilustrísimo Señor Obispo del Cusco, don Fray Vicente de Velarde,
esta iglesia se ubica donde hoy está la catedral que fue construida sobre los
cimientos de la anterior catedral colonial, que fue concluida en 1656 y
destruida por un incendio en 1844.
Los terremotos de 1666, 1668,
1687, 1784 y 2001 provocaron daños de diversa consideración en la Catedral de
Arequipa sin afectar seriamente su estructura. Después de cada sismo, se
procedió a la reparación y restructuración de los daños. Pero el terremoto del
año 2001 hizo que una de sus torres la izquierda colapsara completamente, pero
en el año 2002 hubo la reinauguración de la catedral y la plaza por los daños
hechos en el terremoto.
La Catedral de Arequipa tiene la
peculiaridad de no poseer una fachada frontal sino lateral con la que ocupa
íntegramente el lado norte de la Plaza de Armas destacándose en toda su
magnificiencia. Su conjunto es hermoso; el altar mayor es de auténtico marmol
de carrara y fue confeccionado en Italia por el célebre escultor Filippo
Moratilla.
La fachada está ornamentada con
70 columnas del clásico orden compuesto y mide 107 metros de longitud su altura
hasta la cornisa es de 15,60 metros, la altura total de las torres es de 43,60
metros tiene tres grandes portadas de arcos de medio punto y dos grandes arcos
laterales. Los medallones de bronce que aparecen en la fachada datan de la
época de la Confederación Perú - Bolivia (1836); en un medallón figura el
escudo de la República Peruana y en el otro el del Estado Sud-Peruano.
Recordando que la capital del Estado Sud-Peruano fue disputada entre las
ciudades de Cusco y Arequipa, llegando solo a ser la última una capital de
facto.