Artajerjes I fue
un rey aqueménida de Persia (465/464 – 424 a. C.), hijo y sucesor de Jerjes I.
El nombre de Artajerjes (persa Artaxshaca) es interpretado en Heródoto como
“gran guerrero”, aunque esto ha sido desechado por la crítica moderna, que
prefiere traducirlo como “el que reina en el Arta”, “el que reina en la verdad
y rectitud”. Artajerjes I recibe los apodos de Macrocheir en las fuentes
griegas, y Longímano en las latinas; ambos significan ‘el de la larga mano’.
Artajerjes era el segundo hijo de Jerjes y la reina Amestris. Jerjes murió
asesinado por Artabano, un oficial de la corte, en el año 465 a. C.; Artajerjes
tendría por aquel entonces alrededor de veinte años.
Las fuentes nos
dicen que Artajerjes, engañado por Artabano, mató a Darío (primogénito de
Jerjes) creyéndolo asesino de su padre, pero luego ejecutó a los verdaderos
culpables. Aunque los detalles (por la naturaleza de las fuentes, tardías y
basadas en rumores de corte) no se pueden tomar al pie de la letra, el contexto
general refleja una sucesión conflictiva. Un nuevo pretendiente, que se
trataría de Histaspes, otro hijo de Jerjes, se alzó en la satrapía de
Bactriana, pero fue derrotado al poco tiempo.
M. de Koutorga
escribió con respecto a la fecha en que Jerjes murió y Artajerjes ascendió al
trono: “Hemos visto que de acuerdo con la cronología de Tucídides, Jerjes murió
a finales del año 475 a. E.C., y que según el mismo historiador, Temístocles
llegó a Asia Menor poco después de la subida al trono de Artajerjes Longimano”.
(Mémoires présentés par divers savants à l’Académie des Inscriptions et
Belles-Lettres de l’Institut Impérial de France, serie primera, vol. 6, segunda
parte, París, 1864, pág. 147.)
E. Levesque
refuerza este punto de vista cuando señala: “Por lo tanto, de acuerdo con la
Crónica Alejandrina, es necesario situar la muerte de Jerjes en 475 a. E.C.,
tras once años de reinado. El historiador Justino (III, 1) confirma esta
crónica y las afirmaciones de Tucídides. Según él, cuando Jerjes murió, su hijo
Artajerjes era solo un niño, un puer [muchacho], lo que sería cierto si Jerjes
hubiera muerto en 475. En esa fecha Artajerjes tendría dieciséis años, mientras
que en 465 habría tenido veintiséis, lo que no habría justificado la afirmación
de Justino. De acuerdo con esta cronología, como Artajerjes comenzó a reinar en
475, el año vigésimo de su reinado sería 455, y no 445, como suele afirmarse”.
(Revue apologétique, París, vol. 68, 1939, pág. 94.)
No obstante, si
Darío murió en 486 a. E.C. y Jerjes en 475 a. E.C., ¿cómo puede explicarse que
algunos documentos antiguos digan que Jerjes reinó durante veintiún años? Es de
sobra conocido que un rey y su hijo pueden ser corregentes. Si tal fue el caso
de Darío y Jerjes, los historiadores pueden contar los años de reinado de
Jerjes desde el comienzo de la corregencia o a partir de la muerte de su padre.
Si Jerjes gobernó durante diez años con su padre y otros once solo, algunas
fuentes pueden atribuirle veintiún años de reinado y otras, once.
Tenemos pruebas
sólidas de que Jerjes fue corregente con su padre Darío. El historiador griego
Heródoto (Historia, VII, 3) dice: “Darío reconoció que [Jerjes] tenía razón y
lo nombró su sucesor. (En mi opinión, sin embargo, Jerjes hubiera reinado aun
sin seguir ese consejo [...].)”. Estas palabras indican que a Jerjes se le
nombró rey durante el reinado de su padre Darío.
LA REBELIÓN EGIPCIA
Los desórdenes
internos por los que pasaba el Imperio persa fueron aprovechados por el líder
libio Inaro para rebelarse en el Bajo Egipto. Con la ayuda de mercenarios
atenienses, las primera expedición, comandada por el sátrapa Aquemenes, tío de
Artajerjes, fue derrotada en Papremis hacia el 460 a. C. Aquemenes fue muerto
por los rebeldes, y las tropas persas se refugiaron en el “Castillo Blanco” -la
ciudadela- de Menfis. En el 456 a. C., un ejército persa comandado por los
sátrapas Megabizo y Artabazo reprimió la rebelión egipcia. Los mercenarios
atenienses huyeron a Cirene, mientras que Inaro fue capturado y crucificado
años más tarde.
ARTAJERJES Y GRECIA
La política de
Artajerjes con respecto a Grecia se concentró en el debilitamiento del
predominio naval de la Liga de Delos, afianzado tras la batalla de Eurimedón
(c.468 a. C.). Cerca de 457 a. C. una embajada persa fue enviada a Esparta para
que ésta le declare la guerra a Atenas, y así apartar la atención ateniense de
Egipto. La embajada fue infructuosa, y luego de la victoria persa en Egipto
hubo enfrentamientos con Atenas en Chipre (c. 450 a. C.). El progresivo
retroceso frente a la Liga de Delos y las derrotas en Chipre habrían llevado al
establecimiento (hacia 449 a. C.) de la llamada Paz de Calias, la cual, según
Diodoro Sículo, presentaba las siguientes cláusulas:
- Se le concede la autonomía a las ciudades jónicas de Asia Menor.
- Ningún sátrapa persa tiene jurisdicción sobre la costa del mar Egeo.
- Se prohíbe la navegación persa en el mar Egeo.
- Atenas no puede intervenir en los territorios persas.
Si bien se
tienen dudas sobre la existencia y el contexto de este tratado, el fin de las
hostilidades directas entre la Liga de Delos y Persia hacen pensar en, por lo
menos, un acuerdo verbal entre ambas partes, aunque se cree que su contenido
era diferente al que es expuesto por Diodoro Sículo.
RETRATO EN EL LIBRO DE ESDRAS
Artajerjes
encargó a Esdras un sacerdote-escriba judío, a través de una carta de decreto,
que se encargara de los asuntos eclesiásticos y civiles de la nación judía. Una
copia de este decreto aparece en el Libro de Esdras, 7:13-28. Esdras entonces
abandonó Babilonia en el primer mes del séptimo año (aproximadamente 457 a. C.)
del reinado de Artajerjes, al frente de una compañía de judíos que incluía a
sacerdotes y levitas. Llegaron a Jerusalén el primer día del quinto mes del
séptimo año (Calendario hebreo). La reconstrucción de la comunidad judía en
Jerusalén había comenzado bajo Ciro el Grande quien había permitido a los
judíos cautivos en Babilonia regresar a Jerusalén y reconstruir el Templo de
Salomón. Una serie de judíos liderados por Zorobabel (descendiente del rey
David) habían en consecuencia regresado a Jerusalén en el año 537 a. C.
ACTIVIDAD CONSTRUCTORA E INSCRIPCIONES
REALES
Artajerjes
construyó en Persépolis un palacio, del que hoy quedan prácticamente sólo los
cimientos, y completó la llamada “Sala de las Cien Columnas” (la sala del
trono), iniciada por Jerjes. Se cree que, siguiendo el precedente de Jerjes y
Darío, fue enterrado en Naqsh-e Rostam (seis kilómetros al norte de
Persépolis), aunque la tumba que se le atribuye es anónima. La mayor parte de
sus inscripciones reales han sido halladas en Persépolis. Estas están escritas
tanto en persa como en babilonio y elamita, y son menores en extensión y
cantidad que las de sus predecesores.
FAMILIA REAL Y CORTE
Las fuentes
griegas nos pintan un Artajerjes firme en cuanto a política exterior, pero
débil frente a la corte y las mujeres de la familia real. Continuamente
relacionan los hechos políticos con deseos de venganza o intrigas amorosas. Un
problema abierto está en determinar cuánto hay en esto de rumores de la época,
de inserciones literarias de los autores o de prejuicios de la sociedad griega,
y cuánto refleja con cierto grado de veracidad la vida de la corte en tiempos
de Artajerjes.
Entre las
mujeres que se nos presentan con roles centrales dentro del reinado de
Artajerjes están su madre Amestris y su hermana Amitis, esposa del sátrapa
Megabizo. Damaspia, la reina, dio a luz un único hijo, el futuro Jerjes II.
Según Ctesias,6 Artajerjes tuvo diecisiete hijos más, de los cuales Sogdiano y
Oco (futuro rey Darío II) disputarían el trono con Jerjes II. Su hija
Parisátide sería reina de su medio hermano Darío II, con quien engendraría al
futuro rey Artajerjes II.