Isidore Marie Auguste François
Xavier Comte, nació en Montpellier (Francia), el 19 de enero de 1798; y
falleció en París, el 5 de septiembre de
1857. Se le considera creador del positivismo y de la disciplina de la
sociología. Junto con Agustín Thierry, fue secretario del conde Henri de
Saint-Simon durante siete años y ambos se separaron de él debido a las muchas
discrepancias que surgieron. Después de esta ruptura, Comte inició una etapa
que calificó de "higiene cerebral" para alejarse de la influencia de
las ideas de Saint-Simon.
Otra versión menciona que
Saint-Simon cedió los derechos de su avance (los Principios de la sociología) a
Comte, con la condición de que la mejorara y la diera a conocer al mundo
entero, ya que Saint-Simon había dejado atrás o en el olvido toda su
investigación. Por eso se considera a Comte el padre de la sociología.
La filosofía de Comte encontra
con la revuelta moderna contra los antiguos que inició Francis Bacon y
consistió, a grandes rasgos, en la asunción de la razón y la ciencia como
únicas guías de la humanidad capaces de instaurar el orden social sin apelar a
lo que él considera oscurantismos teológicos o metafísicos. La evidente
intención de reforma social de su filosofía se adhiere, sin embargo, a una
postura conservadora y contrarrevolucionaria en claro enfrentamiento con las
propuestas ilustradas de Voltaire y Rousseau. Tomando como trasfondo la
Revolución francesa, Comte acusa a estos dos autores de generar utopías
metafísicas irresponsables e incapaces de otorgar un orden social y moral a la
humanidad.
La idea básica de Comte era que
todas las ciencias formaban una jerarquía, de manera que cada eslabón dependía
del anterior de acuerdo a la complejidad de los fenómenos estudiados. En la
base estaban las matemáticas, seguida de la mecánica, la física, la química, la
biología y por último, encabezando la pirámide de las ciencias se encontraba la
Ciencia de la Sociedad; la Sociología. Comte vio en esta ciencia las respuestas
a los problemas del hombre y la sociedad. La exaltación de la Sociología le
llevó a considerarla prácticamente como una nueva religión laica de la humanidad
formándose así el positivismo.
Los problemas sociales y morales
han de ser analizados desde una perspectiva científica positiva que se
fundamente en la observación empírica de los fenómenos y que permita descubrir
y explicar el comportamiento de las cosas en términos de leyes universales
susceptibles de ser utilizadas en provecho de la humanidad. Comte afirma que
únicamente la ciencia positiva o positivismo podrá hallar las leyes que
gobiernan no sólo la naturaleza, sino nuestra propia historia social, entendida
como la sucesión y el progreso de determinados momentos históricos llamados
estados sociales.
La filosofía positiva como tipo
de conocimiento propio del último de los tres estados de la sociedad según la
ley de los tres estados, se define por oposición a la filosofía negativa y
crítica de Rousseau y Voltaire (postura a la que Comte atribuye los males de la
anarquía y la inseguridad social que caracterizan al período
post-revolucionario). El término positivo hace referencia a lo real, es decir,
lo fenoménico dado al sujeto. Lo real se opone a todo tipo de esencialismo,
desechando la búsqueda de propiedades ocultas, características de los dos
primeros estados.
Lo positivo tiene como
características el ser útil, cierto, preciso, constructivo y relativo (no
relativista) en el sentido de no aceptar ningún determinismo absoluto a priori.
Se podría afirmar también que la filosofía positivista lo que hace es basar su
conocimiento en lo positivo, o sea en lo real, dejando a un lado las teorías
abstractas como la del fenomenalismo kantiano, al considerarlas como
metafísicas.
Comte plantea tres estados del
conocimiento humano: un estado teológico, un estado metafísico (concreto /
abstracto) y un estado positivo, el más deseado y al que en teoría deberían
tender los dos anteriores, ya que basa el logro del conocimiento en la razón
aplicada. En fin, lo que busca la Filosofía positiva de Augusto Comte es una
reorganización social, política y económica en el contexto de la Revolución
industrial.